sábado, 5 de enero de 2013

La unión del grupo

Antes de empezar, agradecer a todas aquellas personas que siguen el blog, lo leen y también participan tanto por redes sociales como por el blog y por el correo (ja.servan@gmail.com). Daros las gracias, porque en sólo tres días hemos superado las 1500 visitas, muchísimo más de lo que preveía. He puesto a vuestra disposición (en la parte derecha del blog), para aquel que quiera suscribirse, sólo tiene que poner su correo electrónico y le enviarán un mensaje de activación, el cual sólo habrá que pinchar en la URL. Ahora ya, sí que sí, empecemos…

Quizás este sea uno de los temas más complicados de tratar, pero a la vez uno de los más importantes, por el simple hecho de que condiciona al equipo como tal. Una vez que hemos llegado a un club y hemos tenido que realizar las pruebas y ya hemos configurado a nuestro equipo, partimos de cero. La mayoría no se conocen entre ellos y hasta hace unos días competían entre ellos mismos por estar en el equipo.

A día de hoy, he conocido entrenadores que no le importan que su equipo este unido, se lleve bien… Pero la gran mayoría (cosa que yo comparto), piensan todo lo contrario, que el equipo ha de estar unido, que haya un buen ambiente, pero ¿por qué es conveniente esa unión? Y, ¿cómo puede integrarse un entrenador en el equipo?

Estos son a grandes rasgos lo que vamos a tratar hoy. A mí siempre me ha gustado que un equipo esté muy unido y compacto, pero, no siempre es fácil de conseguir. Los niños, fácilmente se unen entre ellos, sobretodo de infantiles para abajo. Los cadetes y juveniles, ya empiezan a querer ser tratados como adultos, aunque por mucho que quieran los cadetes, siguen siendo niños. Vayamos a la cuestión, y es por qué es buena la unión. Un equipo que está unido es más fácil que empiece a compenetrarse desde el primer momento, además de que haya una buena relación entre ellos mismos. Si os dais cuenta, sobre todo, en los más pequeños cuando estás entrenando o en un partido, se la pasan entre amigos, por el simple motivo de que conocen al amigo y saben cómo juega, y no se la pasan a otros, no porque puedan ser mejores o peores, sino porque no le conocen.

¿Qué hacer para que se conozcan antes? Aquí juega un papel muy importante el entrenador, es más, dependerá de él la relación con y entre sus jugadores. Interviene mucho la psicología en este aspecto, y en este caso, voy a decir qué hago yo. Para comenzar, siempre el primer día dedico una gran parte del entrenamiento a comunicarme con ellos. Primeramente, una presentación (la cual repito otro día más), que sea sencilla, por ejemplo: nombre, apellidos y equipo de fútbol, ¿qué objetivo tiene esta presentación? Tiene varios, el primero intentar captar algún nombre, ya que tarde o temprano hay que aprendérselos, por otra parte, se pueden ver dos cosas, aquel que es tímido y le cuesta hablar, y al que empiezas a ver que no se va a portar bien (temas que trataremos más adelante).

Luego, me gusta explicarles mi forma de juego, como jugar, que va a tener que hacer cada jugador, como participar en el juego e intentar de vez en cuando, lanzar alguna pregunta, para que la intenten contestar y se sientan importantes. Y la parte que más me gusta y más tiempo dedico, es a hablarles de motivación. Es muy importante hacerles reír, no se trata de parecer un bufón, sino de motivarles. He aprendido que aquel niño que se ríe (todo tiene un límite), rinde entre un 20-25% más que otro que no ríe. Aquel que participa para bien en la conversación, es muy probable que sea un jugador que destaque en el equipo.

Pero lo más importante dentro de la motivación (tema extenso que trataremos) es hacerles ver que hay que ser optimistas, siempre les pongo el ejemplo de: Imaginaros que vais a la luna con un pesimista de compañero, y lo único que dice es ¡nos vamos a caer! ¡Seguro que no llegamos! Vamos te entran ganas de hacerle alguna barbaridad, pues en el fútbol es igual, que un jugador diga ¡Vamos a perder! Si un jugador, sin haber jugado un partido, no cree en su equipo, apaga y vámonos. Es importante hacerles ver que todo está a su alcance y que todo es posible, que no hay nada imposible, y que el que se pone límites es uno mismo.

Luego hay otra parte de motivación que me fascina y es que cuando te dicen: (porque siempre habla alguno) es mentira que podemos hacer cualquier cosa. Yo les digo que aquel que tiene un sueño en mente y lucha por conseguirlo, hace cualquier cosa por lograrlo, lo acaba consiguiendo, y les pongo el ejemplo de “todo lo que tenemos es gracias a los sueños de otros”. Muchos se quedan perplejos, pero es muy sencillo de explicar, los grandes inventores no inventaron porque sí, sino porque su sueño era crear algo nuevo, fuese para lo que fuese, tuviese la utilidad que tuviese, y gracias a esto tenemos los grandes avances en todos los aspectos, porque gracias a una persona que un día tuvo un sueño y se propuse hacerlo realidad, y lo mejor de todo, lo consiguió.

La última parte en cuanto a motivación es la de “nunca dejéis de soñar”. Aquel que tiene algo por el que vivir, y hace todo lo posible por conseguirlo, es aquel que acaba triunfando. Triunfar no tiene por qué significar ganar dinero, va relacionado con la palabra éxito.

Y diréis, ¿sirve para algo la charla? A priori, sirve para motivar, pero sirve para una cosa muy importante, acercarse a los jugadores y tener un primer contacto con ellos, y diréis, ¿la primera impresión es importante? Claramente sí, somos gente que hasta hace poco sobrevivíamos en la selva y si venía un peligro, no tenías tiempo de mirarle a la cara, hacerle un test y hablar con él, le mirabas y si no creías que te caía bien, huías. Pues os aseguro que no hemos evolucionado mucho desde entonces, ya que seguimos pensando en sobrevivir. Es decir, que nos basamos en las primeras impresiones y es muy difícil cambiar una impresión mala a una buena. ¿De qué dependerá un entrenamiento? De cómo os caiga de bien el entrenador, si un entrenador te cae mal, ya puedes hacer cualquier cosa, que haga lo que haga, te seguirá cayendo mal. Pero este aspecto, lo tenemos durante cualquier situación de la vida, dirás que te atienden mejor o peor dependiendo de cómo te caiga la persona que te trate.

Para no salirnos del tema, cuando ya entremos en el terreno de juego, conviene las primeras sesiones trabajarlas por grupos grandes, donde sea todo muy participativo, para que empiecen a conectar entre ellos, y lo más importante, si hay que corregir se corrige, pero no se insulta, para corregir no hace falta insultar, pero si animar. Son niños, que podrían ser vuestros hijos, y yo no apuntaría a mi hijo a que le enseñasen a jugar a fútbol y lo único que hiciesen es insultarle.

Bueno, después de todo esto, es muy probable que el grupo esté animado y se unan, pero es muy importante que esta unión se conserve y de vez en cuando reforzar esa unión, quedando un día para comer, merendar… En definitiva, hacer cosas con ellos y que se sientan importantes.

Esto ha sido todo por hoy, ha sido un poco extenso, pero espero que merezca la pena. El próximo día hablaremos sobre los padres, ¿hay qué hablar con ellos? ¿Deben opinar? ¿Pueden meterse en nuestra forma de entrenar? Y por otro lado, ¿cómo organizar la temporada? ¿En qué debemos enfocarnos? ¿Hacer un equipo de competición, de aprendizaje o las dos cosas?

Me gustaría que me dieses tu opinión y/o me preguntes o cualquier cosa, para eso lo puedes hacer vía:

Twitter: @JoseteServan

E-mail: ja.servan@gmail.com

o dejando un comentario en el blog.

Muchas gracias y un saludo a todos, y si os ha gustado, podéis hacer Retweet, pasar el blog a vuestros amigos, en definitiva, que lo compartáis, para que así haya más gente que pueda leerlo.


2 comentarios:

  1. enhorabuena, eso que no soy de leer, pero me va gustando tu blog

    ResponderEliminar
  2. Muchísimas gracias Fran, espero que te siga gustando y leas las nuevas entradas. Si quieres ahora puedes seguirnos, arriba a la derecha aparece un apartado donde pone seguidores, solo tienes que iniciar sesión con tu cuenta de hotmail o gmail.

    ResponderEliminar